Endesa obtuvo un beneficio neto de 1.305 millones hasta septiembre, un 8,2% más que en el mismo periodo del año pasado, cuando ganó 1.206 millones.

Según ha informado la compañía, si no se tienen en consideración la operación de intercambio de Emission Reduction Units (ERUs) y Certified Emission Reductions (CERs) por European Union Allowances (EUAs) ni la integración de Enel Green Power España, el beneficio aumentaría en un 22,3% .

EndesaEndesa ha alcanzado hasta septiembre un margen bruto de 4.338 millones de euros, con un incremento del 3% y el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 2.869 millones de euros, un 4,3% más y un 10,8% superior sin extraordinarios.

El consejero delegado, José Bogas, ha destacado “la fortaleza y fiabilidad de la compañía, cuyos resultados hasta septiembre permiten anticipar que la compañía cumplirá con los compromisos planteados a los inversores en su plan estratégico. Este resultado se ha conseguido gracias a la estrategia de gestión del negocio, que ha logrado un incremento del 16% en el margen del negocio liberalizado, a la estabilidad del negocio regulado y a la eficacia de los planes de contención de costes”.

La compañía destaca la “sólida” generación de cash flow operativo, que aumenta en 861 millones como consecuencia, fundamentalmente, de la evolución del capital circulante, así como del menor pago de impuesto sobre sociedades, que se ha reducido en 328 millones.

Esta generación de cash flow es la causa de que la deuda financiera neta de Endesa haya aumentado en “sólo 641 millones” con respecto al cierre de 2015, a pesar de la adquisición de EGPE y sus filiales por un valor de 1.207 millones, así como por el pago del dividendo con cargo al resultado de 2015 por un importe de 1.086 millones de euros.

En los nueve primeros meses del presente ejercicio, la demanda eléctrica peninsular se ha mantenido en línea con la del año anterior, con un aumento del +0,1% (-0,1% una vez corregidos los efectos de laboralidad y temperatura).

La producción eléctrica peninsular en régimen ordinario de Endesa ha descendido como consecuencia fundamentalmente de la elevada disponibilidad de energía eólica e hidráulica.