Joan Font está preparado para seguir los pasos de otros pilotos que, tras brillar en el Mundial de Rallys, se atreven a dar el salto al Dakar. El catalán afronta el reto de ‘sobrevivir’ a la carrera más dura del mundo con el side-by-side Yamaha YXZ1000R copilotado por Gabi Moiset. “Estoy con muchas ganas de vivir esta experiencia, aunque le tengo un gran respeto a esta carrera y soy consciente de lo duro que será”, reconoce.

En el Dakar, el piloto del equipo Yamaha Trivimon se reencontrará con varios de los que fueron sus rivales en el Campeonato del Mundo de Rallys, entre 2006 y 2015. En ese periodo, consiguió brillantes resultados en la categoría Grupo N, como las segundas plazas en los rallys de Suecia 2014, Montecarlo 2013 y Catalunya 2008. En su trayectoria también cuenta con un título de campeón de España de Rallys de Tierra (2 Ruedas Motrices) en 2003, como piloto oficial de SEAT.

Joan_Font_Previa_Dakar_5Font, que competirá en la categoría T3 Light, reservada a los ATV, ha dedicado todos sus esfuerzos esta temporada a preparar su debut en la cita que arrancará el próximo 2 de enero en Asunción (Paraguay). “Tengo el Dakar en el punto de mira desde hace tiempo, porque creo que todo piloto de rallys consagrado debe disputar esta carrera alguna vez. Soy consciente del reto que representa y, por eso, quiero aprovechar esta experiencia para aprender día a día, sin marcarme ninguna meta deportiva concreta”, afirma el piloto de Vic (Barcelona).

Su arma será un side-by-side con una buena relación peso-potencia, ya que pesa menos de 1.000 kg y desarrolla 120 CV. El Yamaha YXZ1000R cuenta con un chasis creado específicamente para la competición y homologado por la FIA, pero con una mecánica (motor, transmisión, frenos y suspensión) de serie. Bajo su capó monta un motor tricilíndrico de moto de 1.000 cc y 4 tiempos.

 

La hora de la verdad llegará del 2 de enero cuando arranque el raid dakariano. Para llegar a la meta del día 14, tendrá que superar 9.000 exigentes kilómetros, con unos 4.000 de ellos cronometrados por Paraguay, Bolivia y Argentina. “Todo el mundo dice que será una de las ediciones más duras desde que se corre en Sudamérica, lo que me da un gran respeto. Sobre el papel, el recorrido tiene muy buena pinta aunque reconozco que parece durísimo. Lo que más me preocupa es la altura de Bolivia, porque el cuerpo humano no se puede graduar”, apunta.

La navegación será otro de los temas que marcará la diferencia este año. En este sentido, Font contará con la inestimable ayuda de su copiloto mítico Gabi Moiset, que suma seis ediciones dakarianas a sus espaldas, la última en 2015 junto a Etienne Smulevici. Según el piloto de Yamaha Trivimon, que cuenta con el apoyo de Doga, “la experiencia de Gabi en todos estos años nos servirá de gran ayuda para superar las etapas más difíciles de navegación, que deberemos afrontar con la mayor serenidad posible”.