Los españoles son más o menos igual de optimistas que hace un año -un 5,3 sobre 10-, pero un 30% más de ellos, hasta el 74%, prevén aumentar su consumo. Algo parecido ocurre en los 12 países europeos incluidos en el Observador Cetelem 2007, el informe anual del banco de crédito al consumo Cetelem.

Los habitantes de Alemania, Bélgica, España, Francia, Italia, Portugal, Reino Unido, Hungría, Polonia, República Checa, Eslovaquia y Rusia califican sus expectativas generales (políticas y económicas) para 2007 con un 4,8 de media por países, y su previsión de aumento de consumo alcanza el 61%, también de media, frente al 41% el año anterior.

España sigue siendo uno de los países más positivos de la muestra, sólo superado por el 6 de Bélgica. El año pasado la nota española fue prácticamente la misma, 5,5. Salvador Maldonado, director de Relaciones Externas de Cetelem, atribuyó este estancamiento a la deuda creciente de los hogares, que se deriva de la compra de viviendas, y a la subida de los tipos de interés , señaló durante la presentación del estudio. Hasta el 85% del endeudamiento de las familias corresponde a las hipotecas, mientras que los créditos al consumo suponen entre el 12% y el 15%. España está sólo por detrás del Reino Unido y Alemania en cuestión de deuda por hogar, con 5.896 euros.