El delegado territorial de Lugo, José Manuel Balseiro, ha explicado que la Xunta de Galicia pretende que la totalidad del territorio tenga cobertura en un geodestino con el objetivo de incrementar “la demanda turística, tanto en viajeros como en pernoctaciones”.
Balseiro se mostró convencido “de la relevante capacidad turística de la provincia de Lugo, confirmada en la extraordinaria evolución experimentada en este ámbito durante el pasado año, cuando obtuvimos una cifra récord de visitantes con un incremento de la demanda del 4,8%”.
El delegado recordó que los geodestinos están contemplados en la normativa turística de Galicia; en concreto, la provincia de Lugo está dividida en cuatro: Lugo-Terra Chá, A Mariña lucense, A Ribeira Sacra y Os Ancares-Courel. Son espacios que pertenecen a áreas geográficas limítrofes, con una identidad turística singular y diferenciada y permiten presentar una oferta unitaria.
De ellos, están operativos lo de la Ribeira Sacra, a través del Consorcio de Turismo, y el de A Mariña, a través de la Mancomunidad de Municipios. Turismo de Galicia firma sendos convenios con estas entidades para el desarrollo de actividades de fomento de turismo que sirvan para reafirmar el geodestino.
Balseiro se refirió a la buena acogida que tuvo por parte de los responsables municipales a propuesta para poner en marcha los de Lugo-Terra Chá y Os Ancares-Courel, y aseguró que la Xunta está prestándoles asesoramiento técnico en estos primeros pasos.
En todo caso, apuntó, la Xunta tiene un papel “impulsor” y colabora con ayudas económicas destinadas a los geodestinos pero “son los ayuntamientos los que deciden sobre el proyecto”. “Por eso los convocamos en un primero encuentro exploratorio para conocer se estaban dispuestos la esa integración y para que sean ellos los que decidan el modelo en el que quieren organizarse”, aseguró el delegado.
El delegado afirmó que en materia de turismo es importante sumar esfuerzos y valoró positivamente el interés que mostró la Diputación Provincial por los geodestinos, si bien considera que este es momento de que los ayuntamientos decidan, en base a su autonomía, como van a desarrollar la gestión, “y después la Diputación tendrá oportunidad de ofrecerles una colaboración real, como hace la Xunta de Galicia que acerca 100.000 euros anuales al de la Ribeira Sacra y 80.0000 a la Mancomunidad de A Mariña, en apoyos directos para la promoción turísticas en base al número de municipios”.