La inversión productiva extranjera en España alcanzó en 2016 los 23.476 millones de euros brutos, un 1,2% menos que los 23.766 millones de 2015, según los datos del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.

En términos netos (restando desinversiones), 2016 se cerró con un saldo de 17.535 millones de euros de inversión productiva, un 2,1 menos que los 17.904 millones de 2015.

“El volumen de 2016 es muy significativo porque se compara con un 2015 excepcional, en el que se registraron operaciones singulares que elevaron la inversión sustancialmente. Además, esta evolución se produce en medio de un débil contexto internacional, con caídas generalizadas en los flujos de inversión”, señalan desde el Ministerio.

La inversión directa extranjera total (incluye las ETVE -entidades de tenencia de valores extranjeros- que son financieras y no generan efectos económicos reales significativos) alcanzó los 33.096 millones de euros brutos, un 30,8% más que en 2015; y 25.739 millones netos, con un aumento del 33,5%. La inversión de las ETVE se situó en 9.620 millones de euros, un 527% más que un año antes y en términos netos creció el 498%.