El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, trató ayer de tranquilizar a los beneficiarios de las pensiones de viudedad asegurando que la reforma que prepara el Gobierno con los agentes sociales no recortará ni eliminará ninguna de estas prestaciones. Es más, aseguró que las pensiones mínimas de viudedad se incrementarán cada año «muy por encima del IPC».

En su coparecencia en el Senado para explicar el reciente acuerdo de la reforma laboral, Caldera explicó que la reforma de las pensiones se basará en la subida de las pensiones mínimas de viudedad, la extensión de esa prestación a las parejas de hecho y una modificación en relación con las personas divorciadas. Cualquier reforma que se acometa «no perjudicará a nadie», insistió el ministro.

Otro de los asuntos laborales que ayer captó el interés laboral fue la prevención de los accidentes de trabajo. En unas jornadas organizadas por La Caixa, en las que participaron el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, y los líderes sindicales de CC.OO., José María Fidalgo, y de UGT, Cándido Méndez, entre otros.

Conde-Pumpido aseguró que para reducir la siniestralidad se debe «acabar con la indiferencia» ante este problema, mientras que Fidalgo y UGT exigieron a los empresarios que cumplan las leyes, y reclamaron más inspectores.