Al cierre del ejercicio del año 2005, el primero tras la plena integración de Banco Atlántico y de la puesta en marcha del nuevo plan director trienal ViC 07, Banco Sabadell ha obtenido unos resultados que confirman la excelente progresión del negocio y el éxito de su estrategia de crecimiento con rentabilidad.

Esta favorable evolución, unida al riguroso control de los gastos, ha llevado consigo un sustancial incremento del 23,7% en el margen de explotación y la obtención de un beneficio neto atribuido de 453,13 millones de euros, que es un 21,4% superior al del año 2004.

A 31 de diciembre, los objetivos fijados para este primer año del Plan Director 2005-2007 se habían alcanzado plenamente y se había entrado en el ritmo esperado de crecimiento consistente y continuado de los volúmenes de negocio y mejora de las ratios de eficiencia y de rentabilidad.

Las magnitudes interanuales de referencia de la actividad desarrollada muestran a finales de año una evolución muy favorable en las diferentes líneas de negocio y segmentos prioritarios y, asimismo, ponen de manifiesto el estricto control del gasto y la rigurosa gestión del riesgo que se ha realizado durante el ejercicio.

Evolución del balance
Los incrementos sustanciales que presentan las diferentes partidas del balance consolidado al cierre del año 2005 reflejan fielmente la actividad desarrollada y la aportación de las sinergías de negocio, derivadas de la plena integración de la red de oficinas que provenían de Banco Atlántico en la dinámica comercial de Banco Sabadell.

Inversión
La inversión crediticia a clientes ha crecido a un buen ritmo y de forma diversificada. A 31 de diciembre, alcanza los 41.642,70 millones de euros, un 21,3% más que en la misma fecha del año anterior.

En este epígrafe del balance destaca el crecimiento de la financiación a empresas y, especialmente, los importantes aumentos registrados en las cesiones de factoring y en los anticipos de confirming, que se incrementan un 41,1% y un 26,0% en el último año, respectivamente.

El crédito hipotecario ha crecido un 27,3% interanual con una muy destacada aportación de las hipotecas a empresas que, de un año a otro, han aumentado un 40,5%.

El estricto análisis y el riguroso seguimiento del riesgo crediticio que se lleva a cabo han permitido reducir aún más los ya de por sí bajos niveles de morosidad. La ratio de morosidad respecto al total de la inversión crediticia se sitúa ahora en el 0,49% (0,61% a 31 de diciembre de 2004).

Con las provisiones efectuadas, la cobertura respecto a los riesgos dudosos y en mora es del 383,07%.