El resultado neto de Abengoa en el primer trimestre ascendió a 5.561 millones de euros debido principalmente al beneficio no recurrente por importe de 5.814 millones de euros recogido en la cuenta de resultados derivado de la reestructuración financiera.

Esta cifra se compone de cancelación de pasivos financieros por 8.461 millones de euros, alta de nueva deuda refinanciada por 1.943 millones de euros, efecto impositivo por 566 millones de euros y comisiones y otros gastos por 138 millones de euros.

“El reconocimiento de este resultado positivo proveniente de la quita de deuda y las ampliaciones de capital previstas en el Contrato de Reestructuración, compensan en gran medida las pérdidas reconocidas al cierre del ejercicio 2016 y ha permitido reestablecer el equilibrio patrimonial en Abengoa”, señalan desde la compañía.

Durante el primer trimestre, la empresa ha registrado ventas de 336 millones de euros y un Ebitda de 24 millones de euros, cifras que excluyen el impacto de la actividad de bioenergía y de las concesiones de las líneas de transmisión de Brasil, que se presentan como resultados procedentes de operaciones discontinuadas.

La reestructuración financiera ha implicado una “reducción significativa” en el endeudamiento financiero bruto consolidado de la compañía, que ha pasado de 12.258 millones de euros a cierre del ejercicio 2016 a 5.734 millones de euros a 31 de marzo de 2017. De estos 5.734 millones de euros de endeudamiento financiero bruto, 2.257 millones de euros corresponden a deuda de sociedades clasificadas como mantenidas para la venta.