La participación ascendió al 62,8 por ciento del cuerpo electoral por lo que, aunque este referéndum no era de carácter vinculante, los partidos políticos deberán respetar el resultado ya que se habían comprometido a que sus resultados fueran tomados en cuenta siempre que la participación superara el 30 por ciento.

Este segundo golpe al Tratado constitucional europeo, después del rotundo rechazo de Francia el pasado domingo, pone en mayores dificultades a los líderes de los Veinticinco, que todavía mantienen en su mayoría la necesidad de mantener el proceso de ratificaciones. En teoría, el Tratado debería estar ratificado por todos los Estados miembros antes de noviembre de 2006.

La próxima cita será el 16 y 17 de junio en Bruselas, donde los jefes de Estado y de Gobierno de la UE se verán confrontados a la necesidad imperiosa de encontrar una solución política para esta crisis, que ha puesto en vía muerta su proyecto político para la Unión ampliada. Francia dijo no el domingo al Tratado europeo con un 56 por ciento en contra, y este miércoles, según los sondeos, en Holanda, el rechazo asciende hasta el 63 por ciento.

Los holandeses se han sumado al rechazo francés a la Constitución Europea y han dicho no al texto del Tratado con un 61,6% de votos en contra frente a un 38,4% que optaron por el sí . Los líderes europeos apuestan ahora por la continuidad del proceso de ratificación y proponen abrir un debate en profundidad en el próximo Consejo Europeo de la UE el 16 y 17 de junio.

Con la victoria del no , Holanda se convierte en el segundo país fundador de la UE, tras Francia, que rechaza el Tratado Constitucional.

Estoy decepcionado, no estoy contento con el resultado porque el Gabinete abogaba por el sí , ha declarado el primer ministro holandés, Jan-Peter Balkenende.

Los ciudadanos nos han dado una señal inequívoca y la respetaremos , aseguró.

Sin embargo, en la línea de otros líderes europeos, Balkenende expresó el deseo de que el proceso de ratificación siga en los demás países de la UE, al considerar que los Veinticinco deben poder manifestarse sobre la Constitución, porque es importante saber lo que cada país piensa .

El primer ministro destacó que el resultado del referéndum holandés fue un veredicto sobre el Tratado constitucional, no fue un veredicto contra la cooperación europea .

Explicaré los motivos del no holandés a mis compañeros europeos y les pediré que lo traten con justicia, ya que nosotros entendemos las preocupaciones de los holandeses: acerca de la pérdida de soberanía, el ritmo de los cambios sin que los ciudadanos se sientan implicados y las aportaciones financieras de nuestro país (a la UE) , añadió Balkenende.

El primer ministro admitió que Europa ha sido en los últimos años demasiado política y no suficientemente de los ciudadanos, por lo que les involucraremos más en la Europa del futuro , concluyó.