Abengoa ha recibido el permiso para proceder (Notice To Proceed o NTP) de la que será la primera planta que, con tecnología de gasificación, producirá combustibles a partir de residuos sólidos urbanos (RSU) en Estados Unidos.
Por su parte y previamente, Fulcrum BioEnergy Inc, para quien Abengoa realizará la planta, ha obtenido con éxito el cierre financiero del proyecto, condición indispensable para poder comenzar los trabajos.
En concreto, la empresa andaluza será responsable de desarrollar la ingeniería, diseño, construcción y puesta en marcha del proyecto. La planta, que se ubicará en el estado de Nevada, tendrá capacidad para producir 10 millones de galones de biocombustibles al año, que serán utilizados en el sector de la aviación.
Se trata, además, de una importante oportunidad para la compañía que puede, de esta forma, afianzar su posicionamiento en un mercado en el que la demanda de combustible para la aviación continúa creciendo y en el que las alternativas renovables cobran un gran protagonismo. Esta iniciativa proporciona una alternativa sostenible a las grandes cantidades de RSU que se generan en la zona anualmente y que, de otro modo, se desecharían en un vertedero.
Abengoa ha dedicado ya más de un año a los trabajos previos de ingeniería y aprovisionamiento con el objetivo de minimizar posibles riesgos durante la construcción. Está previsto que los trabajos de EPC (Engineering, Procurement and Construction, según su siglas en inglés, o “llave en mano”) comiencen de forma inmediata y que se desarrollen durante más de dos años.