La ciudad de Málaga se convertirá en la capital de la cultura culinaria mediterránea del 11 al 15 de junio con la celebración de la “I Feria Gastronómica del Mediterráneo”, que tendrá lugar en el Palacio de Ferias y Congresos malagueño.

Emporio Ferial y el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga organizarán conjuntamente la citada muestra, que promete ser la gran cita del sector alimentario englobando en el mismo evento al vino y a la alimentación.

El acuerdo oficial de ambas entidades se cerró con la rúbrica entre la concejal de Comercio del Ayuntamiento de Málaga, Patricia Marín y el consejero delegado de Emporio Ferial, Jesús Guirau.

Superficie y expositores

La “I Feria Gastronómica del Mediterráneo” se ubicará en el pabellón número 1 del palacio malagueño, con una superficie de 6.000 metros cuadrados, donde se instalarán más de 220 expositores de la gastronomía mediterránea.

El recién inaugurado Palacio de Ferias y Congresos de Málaga está dotado de 60.000 metros cuadrados y presenta un moderno diseño vanguardista que reproduce en su cubierta la alegoría de un ondulado mar de aluminio en el que nada una gran pez de titanio. El palacio de la capital de la Costa del Sol está llamado a ser el gran espacio estratégico ferial del Mediterráneo.

Asistencia de público

Durante los cinco días de duración de la feria, Málaga se convertirá en la capital de la cocina y productos andaluces y mediterráneos.

Durante tres días el evento estará reservado para los profesionales de la restauración, así como de otros sectores interrelacionados, como bodegueros, hostelería, turismo, etc.

Málaga se constituirá así en un foro de comercio de profesionales del sector, que propiciará el afianzamiento de la provincia andaluza como núcleo comercial del mediterráneo español.

La asistencia de público prevista por la organización es de unas 20.000 personas, pero sin duda esta cifra será superada, ya que la muestra coincide con el comienzo de la época estival en una de las ciudades con mayor afluencia de turistas en España.

Por el indudable interés que la dieta mediterránea despierta entre el público y la calidad de la oferta aglutinada, Emporio Ferial y el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, han dispuesto de dos días en los que la muestra estará abierta a los visitantes no profesionales, coincidiendo con el fin de semana (12 y 13 de junio).

Incentivo de negocios

Durante el transcurso de la “I Feria Gastronómica del Mediterráneo” se celebrarán diversos actos que incentivarán los acuerdos comerciales entre los profesionales del sector, como productores, compradores, intermediarios, asociaciones profesionales, jefes de cadenas de distribución, importadores y exportadores de productos.

Catas comentadas, presentaciones de productos de las empresas fabricantes de alimentos frescos, aceites, frutas y verduras, entre otros productos típicos de la dieta mediterránea, denominaciones de origen de vinos de calidad o la celebración de mesas redondas entre expertos, son algunas de las actividades previstas por la organización.

Pero los eventos que captarán la mayor atención de los visitantes serán la celebración del festival de la cocina andalusí y la jornada de maridaje de vinos y platos confeccionados por los chefs más reputados de España

Vocación internacional

El consejero delegado de Emporio Ferial, Jesús Guirau, ha manifestado la verdadera vocación internacional con la que nace la primera muestra gastronómica, ya que están invitados a participar en la feria todos los países de la ribera mediterránea; Marruecos, Italia, Grecia o Túnez, entre otros.

La primera edición de la Feria Gastronómica del Mediterráneo está llamada a consolidarse como una cita de referencia para el sector alimentario de los países del Mediterráneo. Agentes del sector agroalimentario y vitivinícola, compradores y consumidores nacionales e internacionales establecerán un puente cultural entre Europa y el Norte de África, separados geográficamente, pero unidos por un mismo mar.

Enoturismo, tendencia al alza

En este certamen se podrán exhibir las últimas novedades en Enoturismo, segmento que ha experimentado uno de los crecimientos más sólidos en los últimos años dentro del sector turístico.

La oferta de vacaciones en las regiones vinícolas españolas es ya una práctica cada vez más común entre los viajeros que buscan un turismo de calidad, que englobe el vino, la cultura y la gastronomía.

Las visitas a viñedos y bodegas para aprender las ancestrales técnicas de fabricación de caldos, donde se mezcla las degustaciones con la historia, el arte y la cocina presenta un atractivo que atrae cada vez más a los turistas.