Como cada año, en el mes de septiembre se retoma la actividad empresarial después de un cierto "descanso". Para algunos profesionales comienza, de hecho, un nuevo año de actividad y es el momento de plantearse los nuevos objetivos a cumplir.

No vamos a hablar de esa tontería que algunos llaman "síndrome postvacacional", porque lo cierto y verdad es que el empresario no descansa del todo en vacaciones. Supongo que no soy un bicho raro al decir que buena parte de mis vacaciones las paso leyendo esas revistas profesionales que no he tenido tiempo de leer durante el resto del año, y poniéndome al día en todo aquello que afecta a mi empresa y que el día a día no me ha dejado tiempo de estudiar a fondo con la dedicación que merece, todo ello con la finalidad siempre de mejorar y crecer profesional y empresarialmente. A la vez que aprovecho, también es verdad, para leer con tranquilidad esas novelas de suspense que tanto me gustan.

Y hablando de suspense … hay uno que me tiene muy intrigada. En los últimos días se está hablando mucho del recorte del gasto público pero sin tocar las pensiones, las prestaciones por nacimiento de hijos y otras ayudas a las rentas bajas. Obviamente esto está muy bien, pero ¿de dónde sacará el Estado los ingresos que va a necesitar para las nuevas ayudas que, al parecer, se está planteando? Pues atención porque bien podemos encontrarnos con que se amplíen las inspecciones fiscales a las empresas. De hecho, muchas han recibido ya citaciones de inspección justo antes del mes de julio, que es cuando prescribía el ejercicio 2003.

Si la crisis económica (aunque algunos no quieran verla) supone el cierre de muchas empresas pequeñas y un importante bajón en los ingresos y beneficios de muchas pymes, esto conllevará necesariamente una menor recaudación fiscal (tanto en IVA como en el Impuesto de Sociedades principalmente). ¿De dónde pueden venir los ingresos de la Hacienda Pública para mantener un cierto equilibrio? Es fácil pensar que las inspecciones fiscales aumenten, principalmente a las empresas. Una reflexión que puede hacer que nos preparemos debidamente para un futuro muy próximo.

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