El Grupo Unicaja Banco ha obtenido un beneficio neto de 63 millones de euros al cierre del primer trimestre de 2019, lo que supone un aumento del 10,2% respecto al mismo trimestre del ejercicio 2018. La mejora de este resultado está fundamentada en un aumento del margen bruto del 3,3% -impulsado por los ingresos por comisiones- y en una disminución de los gastos de explotación del 3,4%, así como en unas reducidas necesidades de saneamientos.

El margen bruto sube un 3,3% respecto a marzo de 2018, debido al impulso de los ingresos por comisiones -que crecen el 5,1%-, los dividendos y los resultados de operaciones financieras. Por su parte, el margen de intereses se mantiene estable en el 1,03% sobre activos totales medios.

La entidad ha destacado la “constante reducción” de los activos no productivos -NPAs- (dudosos más adjudicados inmobiliarios), que han caído en 872 millones de euros (-20,1%) en los últimos doce meses, con disminuciones de 737 millones de euros en los activos dudosos (-28,7%) y de 135 millones de euros en los adjudicados (-7,6%). Así, el saldo de activos dudosos del Grupo a cierre del primer trimestre de 2019 disminuyó hasta los 1.833 millones de euros y el de inmuebles adjudicados, hasta los 1.640 millones. La caída de dudosos se traduce en una bajada de la tasa de morosidad de 2,0 puntos porcentuales en los últimos 12 meses, hasta situarse en el 6,3%.

En términos de solvencia, a finales de marzo de 2019, el Grupo Unicaja Banco presentaba una ratio de capital ordinario de primer nivel (CET 1) del 14,9%, y de capital total del 15,1%, entre las más elevadas del sector. En términos de fully loaded (según el cómputo una vez finalizado el período transitorio para la aplicación de la normativa de solvencia), cuenta con una ratio CET1 del 13,3%, y de capital total del 13,5%.