Almirall alcanzó un beneficio neto de 32,6 millones de euros en el primer trimestre, un 5,6% más que en el mismo periodo del año pasado. A tipo de cambio constante, el beneficio creció un 3,3%.

El Ebitda fue de 80,2 millones, (+38,3%) y el margen bruto de situó en 164,2 millones (+25,6%) y una subida del 22,7% a tipo de cambio constante, lo que reflejó una mejora de 420 puntos básicos “gracias al mix de productos”.

Los ingresos totales alcanzaron los 232,2 millones (+15%) y las ventas netas fueron de 224,4 millones, elevándose un 18,5%, “beneficiándose de los resultados de la franquicia de psoriasis y del sólido desempeño del negocio base”.

Para 2019, la compañía estima que los ingresos totales crezcan a un doble dígito “bajo” y que el Ebitda alcance entre 290 y 300 millones, todo ello a tipo de cambio constante. Las ventas netas “está previsto que alcancen un crecimiento de doble dígito bajo y otros ingresos un incremento del 20%”.