Andalucía no puede amparar una doble moral basada en la explotación de mano de obra ilegal . Así lo ha defendido en Huelva el consejero de Empleo, Antonio Fernández, durante la inauguración de la jornada técnica Hacia la integración del trabajador extranjero en el mercado laboral español: inmigración, trabajo y salud , en la que se mostró en contra del trabajo por parte de extranjeros irregulares, no sólo por la vulneración de las normas de extranjería, sino por la de las normas laborales y sociales más básicas .
Para el consejero de Empleo, el fenómeno migratorio está produciendo cambios en todos los aspectos de la vida social, con consecuencias positivas como un aumento de la mano de obra o un incremento y rejuvenecimiento de la población. En este sentido, recordó que la sensibilidad de la Junta con este colectivo ha quedado incluida en el nuevo Estatuto de Autonomía para Andalucía, que tiene entre sus principios rectores la integración social, económica, laboral y cultural de los inmigrantes .
Respecto a la integración en el trabajo, Antonio Fernández recalcó que el ordenamiento laboral debe prestar su apoyo y protección al inmigrante, siempre que éste se encuentre en una situación regular. En este sentido, recordó que la Junta ha sido pionera en España al aprobar ya dos planes integrales para la inmigración en Andalucía, en el que se contemplan medidas para el empleo como la asistencia personalizada y los servicios de interpretación de idiomas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE); la adaptación de todos los programas (incluido el de la Oficina Virtual del SAE) a la población extranjera o la elaboración periódica de un catálogo de ocupaciones de difícil cobertura a disposición de la población inmigrante.
Asimismo, Empleo participa en la elaboración de los contingentes anuales de trabajadores extranjeros, desarrollados por el Gobierno central para canalizar los flujos migratorios laborales hacia las actividades económicas más ofertadas.
Finalmente, el consejero quiso resaltar la importancia de proteger la seguridad y salud de los trabajadores extranjeros, poniendo especial atención a particularidades como la lengua, la formación y la cultura. De este modo, Empleo contempla no sólo las actuaciones que cubren a toda la población en general, sino también medidas concretas como las campañas específicas (como las destinadas a la recogida de la fresa en Huelva) o la financiación de estudios sobre condiciones de trabajo en Huelva o Almería.
Asimismo, el consejero apostó por impulsar la comunicación con los consulados y asociaciones de inmigrantes para realizar actividades de sensibilización y por promover acciones formativas previas a la contratación.
Andalucía es la cuarta comunidad autónoma española con mayor presencia de población extranjera residente de forma regularizada, con un censo de 326.831 extranjeros (incluidos los de origen comunitario), de los que 22.367 son demandantes de empleo. El II Plan Integral para la Inmigración en Andalucía 2006-2009, aprobado el pasado mes de mayo, destinará un total de 1.177 millones de euros a medidas para la plena integración de este colectivo en la sociedad andaluza.
La nueva planificación tiene como principal objetivo asegurar el acceso de los inmigrantes, en condiciones de igualdad con el conjunto de la población, a los servicios básicos de sanidad, educación, empleo, vivienda, asistencia social y atención jurídica.