Formará parte de los 20 retos de I+D+i que se acometerán en el futuro Centro de Innovación Universitario de Andalucía, Alentejo y Algarve

Cobre Las Cruces (CLC), el complejo minero-metalúrgico situado en Gerena, Salteras y Guillena (Sevilla) ha presentado un proyecto que formará parte de los 20 retos de I+D+i que se acometerán en el futuro Centro de Innovación Universitario de Andalucía, Alentejo y Algarve (CIU3A) promovido por el Ayuntamiento de Sevilla, la Universidad y la Autoridad Portuaria.

El objetivo será el uso de los metales de la Faja Pirítica andaluza para la fabricación de baterías de nueva generación destinadas al almacenamiento eficiente de energías renovables.

Esta investigación va de la mano de los planes de futuro de Las Cruces, que contará en los próximos años con una nueva explotación subterránea y una innovadora planta polimetalúrgica (PMR), única en el mundo, para producir no solo cobre, sino también otros tres metales: zinc, plomo y plata. El programa permitirá agregar valor a estos metales, muy abundantes en la Faja Pirítica Ibérica, para desarrollar una batería de nueva generación de zinc-aire, una batería avanzada de plomo y una batería de flujo de hierro que utilizará, como elemento innovador, las bacterias presentes en la mina de Riotinto.

El proyecto de CLC forma parte de las 20 iniciativas aprobadas la pasada semana por la comisión de evaluación del CIU3A. Estos programas se desarrollarán en colaboración con empresas y otras entidades en el marco de un programa de doctorado industrial. El centro contará con financiación procedente de la convocatoria europea INTERREG V-A España-Portugal.

El impacto científico y tecnológico que el proyecto de CLC puede tener en Andalucía es muy importante, ya que conecta varios sectores estratégicos, como son las energías renovables, la minería metálica y el desarrollo sostenible. “Nos encontramos ante una oportunidad de gran alcance para consolidar a Las Cruces y a todo el sector minero andaluz en una posición de vanguardia tecnológica y como un modelo de sostenibilidad basado en la eficiencia energética y en la economía circular”, destaca Carlos Frías, director de Tecnología e Innovación de la compañía.

“CLC es actualmente un gran consumidor de energía eléctrica, y lo seguirá siendo en el futuro. Si a esto se une la instalación de varias plantas fotovoltaicas en los alrededores de la mina, nos encontramos ante una gran oportunidad de generar una sinergia muy eficiente entre producción, consumo y almacenamiento, teniendo también la posibilidad de reciclar las futuras baterías, una vez fuera de uso, en la planta hidrometalúrgica de CLC”, añade.