El presidente de la Autoridad Portuaria, Manuel Fernández, insistió ayer en que la construcción en Punta del Verde de la central de ciclo combinado de Endesa era la solución «óptima» a las necesidades energéticas del puerto y de Sevilla. Pero, tras la declaración de impacto ambiental negativa que hace que el proyecto «esté ya muerto», es decir, que tenga pocas posibilidades de acometerse, «habría que buscar una nueva ubicación -para la central- en la provincia por seguridad para el desarrollo industrial». Fernández, que intervino ayer en los «Desayunos de Antares», recordó que Sevilla es la provincia andaluza que más energía consume «por lo que es necesario para asegurar el desarrollo industrial en ella que la central se ubique en otro sitio, pero que se construya».

A pesar de ello, el responsable del puerto sevillano consideró ayer que las inversiones previstas por Red Eléctrica Española (REE) permitirán que la no construcción de la central «no va a suponer en absoluto un freno para su desarrollo». En ese sentido, el director del puerto, Fausto Arroyo, recordó que REE proyecta inversiones de casi 18 millones de euros en la provincia, incluido una nueva acometida de 220 kilovoltios al puerto, que serán una alternativa a las necesidades energéticas que iba a cubrir la central de Endesa y que por lo tanto la necesidad de energía no va a ser ningún freno a la instalación de nuevas industrias en suelo portuario. De hecho, los responsables del puerto señalaron que en la actualidad se sigue con la dinámica inversora y que la alarma que generó entre los empresarios el «no» a la central está ya «totalmente disipada».

Estas necesidades energéticas se relacionan directamente con la actividad del puerto y los importantes proyectos de futuro que tiene en marcha. El Puerto cerró 2005 con unos resultados que dejan claro que fue un buen ejercicio: un crecimiento del doble del IPC, beneficios de 3,2 millones de euros; implantación de 17 nuevas empresas; incremento en el tráfico de contenedores hasta alcanzar los 115.670 y superar las mejores expectativas y un incremento de pasajeros de un 739,9%.

Estas buenas cifras podrían ir a más en un horizonte de pocos años ya que hay en marcha iniciativas que pueden generar mucha actividad económica. Y es que a los proyectos para incrementar las líneas regulares -hay cuatro con Canarias, se ha abierto una con Casablanca y está previsto abrir este año una con la zona de Holanda y Bélgica- y potenciar el uso de las industrias sevillanas de sus instalaciones, se suman los proyectos mejora de sus infraestructuras.

Entre todos destaca la construcción de la nueva esclusa, obra que, junto con la del dragado del río, permitirá la entrada de barcos mayores al puerto y para la que el Banco Europeo de Inversiones, anunció ayer Fernández, ha concedido un crédito de 100 millones de euros que con los 62,8 millones de la ayuda de la Unión Europea garantizan su financiación. Además, tras cierto bloqueo, se ha alcanzado un acuerdo con Astilleros de Sevilla para que acometan las compuertas, de un proyecto que no estará terminado al menos hasta 2008. Hasta entonces no será necesario acometer el dragado, una operación para la que se trabaja en las medidas de protección de las márgenes.