El año pasado, Albal presentó el estudio europeo Save Food, donde se exponían datos alarmantes sobre el desperdicio de alimentos en Europa, tras analizar los usos y actitudes relativos al almacenaje, uso y planificación de la comida en los hogares europeos. Una de las principales conclusiones del citado trabajo fue que los europeos tirábamos, de media, alrededor del 20% de la comida que comprábamos. En España, esto suponía 2,9 millones de toneladas de alimentos desperdiciados al año. La nota más preocupante, pero también esperanzadora, fue que gran parte de la comida que tirábamos se podía haber consumido con una mejor planificación, almacenaje y conservación.

En 2012, Albal da un paso más y presenta la segunda oleada del estudio

Save Food, donde alerta del gran desperdicio de alimentos en seis comunidades autónomas españolas: Andalucía, Cataluña, Galicia, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana.

 

Desperdicio de alimentos en Andalucía

El citado estudio revela que los andaluces tiran al año a la basura unos 300 € (per capita) en productos alimenticios. Esto hace un total de 578 toneladas de comida al año. En este contexto, los andaluces afirman ser una de las regiones que menos excedentes de comida producen, pero la realidad es muy distinta. Es la Comunidad Autónoma con el porcentaje más elevado de desperdicios de comida evitables, concretamente el 10,4% del peso total de alimentos adquiridos.

En cuanto a los hábitos de compra, los andaluces van con más frecuencia a comprar que la media, por detrás de los gallegos. Se observa, además, un elevado grado de impulsividad en sus compras, especialmente en lo relativo a promociones y descuentos. Como contrapunto, Andalucía es una de las regiones que más utilizan productos específicos para conservar los alimentos en la nevera o el congelador.