Cajasol firma convenio con Landaluz para la elaboración y distribución de 78.000 kg de alimentos para familias, comedores, conventos y personas con pocos recursos
Por cuarto año consecutivo la Fundacion Cajasol entrega con la participación del Programa de Voluntariado de la Fundación que han preparado los lotes de más de 5.000 cajas para que puedan atender las necesidades que presentan familias y personas que se encuentran sin recursos además de 8.000 kgs de alimentos para comedores sociales y conventos.
Esta mañana en la sede de la Fundación Cajasol el presidente Antonio Pulido ha firmado el convenio de colaboración con el presidente de Landaluz, Álvaro Guillén por el cual las dos instituciones colaboran un año más en la preparación y elaboración de los lotes de alimentos que en estos días se están entregando a Asociaciones, Parroquias, colectivos, comedores y conventos. Estaentrega de la IV edición de las Cajas de Alimentos que, un año más, la Fundación pone en marcha para atender a familias necesitadas de las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz se realiza en estas fechas navideñas y por cuarto año consecutivo, mitiga los graves efectos que la crisis ha traído a muchas familias y personas de nuestro entorno más próximo. Se vuelve a poner en marcha con una amplia operación solidaria en la que han participado el centenar de Voluntarios del Programa de Voluntariado de la Fundación Cajasol y por la que se están repartiendo un total de 5.000 cajas con alimentos básicos, distribuidas entre las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz, así como 10 lotes de comida a centros benéficos de formación ocupacional y comedores sociales y 14 lotes para los Conventos de Clausura de Sevilla. Un total de 78.000 kgs de alimentos que se están repartiendo en estos días.
Cada una de estas cajas, con un peso de entre 15 y 18 kilos, contiene artículos de alimentación no perecederos como: aceite, leche, arroz, lentejas, garbanzos, alubias, vinagre, filetes de caballa, frasco de patatas laminadas frescas, una lata de paté, latas de aceitunas, altramuces, picos camperos, tableta turrón y estuche surtido de mantecados.
Los comedores, conventos y centros benéficos reciben en grandes cantidades: chacinas, embutidos, aceite, leche, leche infantil, mantecados y picos para dar atención durante aproximadamente los próximos 6 meses.
‘Se trata de una iniciativa con el fin de mitigar los efectos que la crisis que estamos viviendo está trayendo a miles de familias’-, puntualizó Antonio Pulido. Además, el presidente de la Fundación Cajasol ha subrayado que ‘otro año más queremos estar con los más necesitados y, a través de la solidaridad con los más desfavorecidos, devolverle a la sociedad todo lo que ésta le da a la Fundación.
‘Landaluz aglutina a 120 empresas del sector, de las cuales 20 han participado en esta acción y se espera seguir colaborando con la Fundación Cajasol en los próximos años para seguir llevando a cabo este proyecto’– concluyó Álvaro Guillén, presidente de Landaluz.
Desde que comenzó esta colaboración entre ambas entidades, la demanda ha ido creciendo, por las circunstancias económicas que azotan al país, pero la oferta también ha sido aumentada, para poder satisfacer todas las necesidades. Ambas partes firmantes están dispuestas a seguir con esta colaboración en los próximos años.