Ahora que comienzan los pronósticos a hablar de recuperación económica es tiempo de hacer balance, como antaño las tropas recontaban tras una batalla el número de ‘soldados’ que regresaban… Es momento de echar la vista atrás y saber que España desde que comenzó la crisis ha perdido un total de 275.670 empresas, que no es poco. En 2008 existían 3,4 millones de empresas activas mientras que en 2013 la cifra alcanza los 3,1 millones, según fuentes consultadas del Ministerio de Empleo.
En el último año -este 2013- nuestro país ha perdido al día unas 180 empresas. Es decir, se puede decir que desde el año 2008 España ha ido perdiendo al día unas 180 empresas, ni más ni menos. Otro dato interesante es que la gran mayoría de las empresas actualmente son pymes (Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas). Del total de las empresas que hay en España el 96% tiene menos de 10 empleados. Son microempresas. También llama la atención que del total de las empresas más de la mitad son autónomos. Actualmente, de las más de 3 millones de empresas que existen en nuestro país tan sólo 101 son grandes compañías, con 5.000 trabajadores o más, algo así como el 0,003%, una cantidad extremadamente mínima con respecto al total.
Al otro lado, los autónomos que montan su propia empresa -sin más de 10 trabajadores- suponen más del 53% de todo el tejido empresarial. Por otra parte, están las empresas muy reducidas con uno o dos asalariados que representan el 30%. Con estas cifras tan demoledoras es justo reconocer la labor de los autónomos mini-empresarios que son mayoría y que arriesgan a montar un negocio aún contando con pocas infraestructuras, un riesgo mayor, un margen de beneficio más pequeño que el de las grandes compañías, con ayudas paupérrimas, e incluso con algunas trabas por parte de la Administración.
En suma, recordemos, que los autónomos y pymes este año han tenido que adelantar el IVA de facturas que no han cobrado. Estamos de acuerdo que las grandes empresas tienen una gran importancia en la economía, pero sin duda alguna la gran base del tejido empresarial de este país la forman pymes y autónomos.
Es de justicia que las Administraciones y gran parte de la sociedad tome conciencia para exigir más medidas de apoyo a este colectivo mayoritario que es el que verdaderamente puede crear empleo y así notar de verdad que la crisis está comenzando a evadirse.
José Santos
