La crisis ha motivado que los autónomos sean los que más están sufriendo por este motivo”, ha declarado la Secretaria General de UPTA Andalucía, Inés Mazuela.
“Confiamos que en la anunciada reforma fiscal que pretende llevar a cabo el Gobierno central, se tenga muy en cuenta la situación de los autónomos y se establezcan medidas que les favorezcan y no nos perjudiquen más. No pueden ser los autónomos los que actúen como financiadores del Gobierno. Ante la falta de ingresos, les subimos los impuestos, tasas, seguridad social…lo cual hace que tras siete años de crisis, muchos autónomos que han ido aguantando, ya no puedan más. Los autónomos se han visto doblemente castigados durante esta crisis: por una mayor fiscalidad y porque son los principales perjudicados por la crisis del consumo, por lo que esta presión fiscal es la culpable, en buena parte, de la situación económica que España viene sufriendo”.
Como ha afirmado la Consejera de Hacienda de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, “la crisis fiscal de España es una crisis de ingresos, porque la recaudación global obtenida es muy inferior a la media de la eurozona, pese a que los tipos nominales de la mayoría de los impuestos se encuentran entre los más elevados de los países europeos. En concreto, explicó que llevar la presión fiscal a la media europea supondría aproximadamente 70.000 millones de euros adicionales para las administraciones públicas españolas.
No obstante, esta misma semana, en la sesión de control al Gobierno, El presidente, Mariano Rajoy, ha puesto fecha a la reforma fiscal que prepara su gabinete y que Según ha avanzado, entrará en vigor el 1 de enero de 2015 y “favorecerá la tributación del ahorro, así como de las familias y los dependientes, y tratará de promover la creación de empleo”. Desde UPTA Andalucía, esperamos y confiamos que esta reforma sea a la baja y establezca una fiscalidad más acorde con la realidad de los autónomos, “es absolutamente necesario bajar los impuestos y evitar la devaluación salarial para activar la demanda interna, con el objetivo de que estos repuntes se asienten y la economía vuelva a crecer de forma constante”, ha declarado Mazuela.
Otro aspecto que ha destacado, de cara a la próxima reforma fiscal, es que desde la organización “no consideramos posible negociar ningún cambio en el sistema de módulos sin realizar previamente un estudio de las consecuencias para cada sector”, tal y como se ha reclamado por la CEOE. La Patronal ha propuesto igualar la tributación entre empresas y autónomos y la eliminación del sistema de módulos, al que están acogidos casi 600.000 trabajadores por cuenta propia. El régimen de módulos, existente en España desde hace más de 40 años, “ha demostrado sobradamente su eficacia”, no sólo para conseguir un suficiente equilibrio de presión fiscal entre autónomos y empresas, sino también como un elemento para sostener la recaudación.
“El Secretario General de UPTA a nivel nacional ha criticado ya esta intromisión de la CEOE en materia de trabajo autónomo. Son las asociaciones de trabajadores autónomos quienes deben opinar en esta materia y no la CEOE. Desde nuestra organización, consideramos que se podrían introducir modificaciones que mejoren el sistema de módulos, pero rechazamos su eliminación, sobre todo en un momento como el actual, en el que todos los sectores de trabajadores autónomos pasan por dificultades. Y no es suficiente con reducir la opción de los módulos para aquellos autónomos que trabajan directamente para los consumidores finales. Hay muchos autónomos, en la construcción o en el transporte, que deben facturar a empresas debido al control de la intermediación, aunque realmente sus servicios últimos son para las familias y particulares. Esta medida sacaría del sistema de módulos aproximadamente a 300.000 autónomos; al menos, la mitad, de forma totalmente injusta”.
UPTA no considera aceptable que se quiera abordar por parte de Hacienda una eliminación total o parcial del sistema actual de declaración objetiva por módulos en el IRPF, sin que previamente se hayan realizado los estudios necesarios que clarifiquen las consecuencias que puede tener para cada uno de los sectores de actividad y las características de cada uno de ellos. UPTA lleva años pidiendo a los responsables de Hacienda que aborden estos estudios para definir con carácter definitivo los colectivos que pueden acogerse a este sistema simplificado basado en una estimación objetiva de beneficios según los criterios que cada año establece el propio Ministerio de Hacienda.
UPTA espera que Hacienda no tome decisiones precipitadas en un tema tan sensible y que afecta a las rentas de un buen número de trabajadores autónomos. Además, podría inducir a mayor economía sumergida, en especial si se aborda también la eliminación del recargo por equivalencia del IVA.
