Según los últimos indicadores, el actual año parece estar consolidando, las perspectivas de crecimiento esperadas. Con la temporada de verano a punto de iniciarse con la Semana Santa, estos indicadores parecen seguir en aumento. Sin embargo muchas empresas se ven limitadas en cuanto a la contratación de puestos directivos y estratégicos, teniendo que apostar por un nuevo tipo de trabajador, los empresarios internos o “intrapreneurs”. Según el último estudio de Regus, proveedor de espacios de trabajo flexible, realizado entre más de 19.000 empresarios de 98 países, el 50% de los empresarios españoles considera clave promover la figura del “intrapreneur” innovador entre sus empleados para impulsar el crecimiento.
Esta fórmula, sin embargo, nace de otras culturas empresariales como la estadounidense donde empresas como Google o Dell dan cada vez más importancia a impulsar el espíritu empresarial en el seno de sus negocios. Asimismo, el 28% de los empresarios españoles afirma que la combinación de personal que desempeñe distintas funciones es un factor determinante de cara a la innovación. Además, un 68% considera que el espíritu empresarial ha aumentado desde el inicio de la crisis en sus respectivos sectores, junto a un aumento de mujeres empresarias y nuevos negocios.
En cuanto a las medidas clave para promover la figura del “intrapreneur”, los empresarios españoles identifican el acceso al equipo directivo (47%), los programas de actualización de competencias (46%) y los programas oficiales de innovación (32%), según el estudio de Regus.
En relación con los resultados, Philippe Jiménez, Country Manager de Regus afirma: “Las pequeñas empresas representan más del 90% de los negocios y más de las tres quintas partes del empleo en la mayoría de las economías, por ello, las razones por las que el espíritu empresarial debe promoverse y desarrollarse son evidentes. Así mismo, el resto de empresas también se han dado cuenta del potencial innovador que representan sus plantillas y buscan promover el espíritu empresarial entre sus propios empleados”.
Las prácticas de trabajo flexible no solo responden a una mejor conciliación de la vida laboral y personal para los empleados, sino que también les permite relacionarse con otros profesionales que desempeñan diferentes funciones, e incluso con otras empresas, lo cual enriquece su experiencia e innovación dentro de la propia empresa.