Una cuarta parte de la población en España (el 25%) se siente económicamente vulnerable, tras sufrir dificultades financieras durante el pasado año y sin perspectivas de mejora a medio plazo. Es una de las conclusiones que recoge la sexta edición del Índice Genworth, que analiza la vulnerabilidad económica de un país a partir de la situación financiera de los hogares y sus expectativas de mejora. El informe también revela que la cifra de hogares que han atravesado una situación económica adversa en 2013 asciende al 58%, y que solo el 20% confía en que el panorama mejorará en los próximos 12 meses. Únicamente el 8% se siente seguro a nivel económico.

No obstante, el índice –elaborado a partir de una encuesta a 21.000 consumidores en 20 países- muestra que el caso español es muy parecido al de otras poblaciones europeas, incluso similar al de algunas económicamente más fuertes. Así, el 25% de los alemanes y el 22% de los británicos se reconocen vulnerables. Por otra parte, el promedio europeo de los que se consideran seguros es de 9%, un punto por encima del español.

En cuanto a la escala de preocupaciones que quitan el sueño a los españoles, el coste de la vida y el desempleo compiten por el primer puesto, ambos citados por el 49% de los encuestados. Les siguen, a distancia, los reducidos ingresos laborales y la evolución de la economía nacional (motivos mencionados por el 28%). Contar con ahorros insuficientes y los gastos derivados de alquileres e hipotecas inquietan al 26% y al 22% de la población, respectivamente.

Pesimistas pero menos

El Índice Genworth, que clasifica a los hogares en función de su situación económica actual, muestra el incremento de las dificultades económicas y de la desconfianza de los hogares desde el inicio de la crisis. España ocupa la octava posición del ranking establecido por el estudio, escalando dos puestos en relación con el informe publicado en 2013. De hecho, se sitúa por delante de Francia (novena), Polonia (décima), Italia (undécima), Irlanda (duodécima), Portugal (decimotercera) y Grecia (decimocuarta), y acorta distancias con  Gran Bretaña (quinta), Alemania (sexta) y Turquía (séptima).

Como en años anteriores, la lista la encabezan los países escandinavos, en este orden: Noruega, Suecia, Dinamarca y Finlandia.

Se pone de manifiesto, por tanto, que aunque la percepción de vulnerabilidad y dificultad económica de los españoles todavía es elevada, nuestro país ha ascendido en el Índice Genworth desde que comenzara a publicarse en 2007.

Ernesto López, Director General para España de Genworth, opina al respecto:

“El Índice Genworth refleja de nuevo la compleja situación que viven los consumidores españoles, entre los que solo un 8% se considera económicamente seguro. En cualquier caso, este año hemos detectado indicadores que sugieren una subida, aún sutil, del estatus y las expectativas de nuestros hogares. En comparación con el informe publicado en 2012, el número de familias que piensan que el panorama está llamado a mejorar este año se ha duplicado, y la cifra de aquellos que han sufrido dificultades financieras recientemente se ha reducido en un 40%. Además, hemos escalado dos posiciones en la lista de países europeos del Índice.

“Sin embargo, lo que los resultados del Índice de Genworth ilustran es que existe una vulnerabilidad económica en las sociedades occidentales que debe ser solucionada. En estos tiempos de incertidumbre, creemos que es necesaria una colaboración más estrecha entre los sectores privados y públicos. La seguridad privada tiene un papel más importante que jugar a la hora de llenar esa “brecha en la protección” para ayudar a las familias a hacer frente a sus compromisos financieros existentes y a mantener su nivel de vida cuando lo inesperado ocurre”.