Carbures ha firmado un contrato de 200 millones de pesos mexicanos (11 millones de euros) para el desarrollo de plataformas y otras infraestructuras petrolíferas con Petróleos Mexicanos, Pemex, mediante su filial mexicana, PYPSA. Las tareas de ingeniería se circunscriben a los activos petrolíferos que la petrolera mexicana tiene en las regiones marinas Norte y Sur de México.

El contrato se ha puesto en marcha en agosto de 2015 y tiene una duración de 27 meses, lo que permite asegurar a la compañía PYPSA unos ingresos recurrentes hasta finales de 2017. La relevancia de este contrato es que se trata del paso previo a la fabricación de plataformas petrolíferas con materiales compuestos, que reemplacen a las actuales de metal, mucho menos resistentes a la corrosión del agua marina y, en general, a las inclemencias meteorológicas. Esta es otra de las aplicaciones de los materiales compuestos para obra civil que Carbures desarrolla.

“Como todas las operaciones de crecimiento inorgánico, la adquisición de PYPSA se hizo por motivos estratégicos para darnos entrada a nuevos mercados y líneas de actividad en los que el potencial de crecimiento es tremendo por la gran aplicabilidad y conveniencia de los materiales compuestos”, explica el presidente de Carbures, Rafael Contreras.

“Además de plataformas petrolíferas, México es un país que nos ofrece una gran variedad de líneas de actividad, además de en las plataformas petrolíferas, en los sectores de automoción y aeronáutico”, añade Contreras.