El Grupo OHL, a través de su división de concesiones, ha promovido en Perú dos iniciativas privadas (IP) por un importe conjunto de más de 920 millones de euros (1.000 millones de dólares) para el desarrollo y la mejora de dos nuevas infraestructuras de transporte en el país.

Además, la división de concesiones está estudiando otros proyectos de infraestructuras de transporte entre los que se encuentra la Longitudinal de la Sierra Tramo 4, en licitación, esta última, por la Administración Pública peruana.

En concreto, en la ciudad de Lima, OHL Concesiones ha promovido la iniciativa Conexión La Molina-Angamos, declarada de interés público por el Concejo Metropolitano de la capital peruana. El proyecto propone una autopista urbana de 12 km de longitud que integre las principales zonas de servicio y de negocio de la capital peruana.

Con una inversión que supera los 460 millones de euros (500 millones de dólares,) la nueva infraestructura discurrirá a distinto nivel en casi todo su recorrido combinando túneles y trincheras semicubiertas y abiertas.

Asimismo, al sur del país, OHL Concesiones ha presentado una segunda iniciativa privada autosostenible, la concesión vial Panamericana Sur, Tramo Ica-Quilca, por importe próximo a los 460 millones de euros (500 millones de dólares) y declarada ya de prioridad por el Gobierno de Perú.

La carretera Panamericana es el eje vial más importante de Perú, integra sus diversas regiones y conecta las principales ciudades del país. En concreto, se desarrollará en ámbito territorial de los departamentos de Ica y Arequipa.

En la actualidad, el tramo sur de este eje de comunicación soporta, en buena parte de su recorrido, el paso de vehículos pesados por centros de población, así como condiciones de circulación que demandan mejoras. La propuesta prevé una autopista de, aproximadamente, 518 km de longitud.

Estas inversiones se suman a los más de 370 millones de euros que OHL Concesiones gestiona en la Red Vial 4 que, con una longitud de 356 km, conecta las ciudades de Pativilca y Trujillo y forma parte de la Panamericana Norte, arteria principal de comunicación que recorre la costa peruana.