La compañía farmacéutica Almirall obtuvo en 2015 un beneficio neto de 131,8 millones de euros, un 70,6% menos que en 2014. Tras su acuerdo con AstraZeneca, su resultado neto creció un 89,7% el año pasado, hasta los 82,5 millones.

El EBIT y Ebitda fueron  de 131,8 y 205,7 millones de euros respectivamente, impulsados por Dermatología, lo que supone un crecimiento del 91,8% y 26,0% like-for-like, “con una mejora significativa de los márgenes”.

AlmirallLos ingresos totales alcanzaron los 769 millones, lo que representa un incremento de un +0,9% (like for like) y la deuda financiera al final del año alcanzó un total de 319,7 millones.

Para Eduardo Sanchiz, consejero delegado de la compañía, “2015 ha sido un año emocionante para Almirall. En primer lugar, hemos logrado unos resultados financieros en la parte alta del rango de las nuevas estimaciones mejoradas en octubre de 2015. Dermatología sigue siendo el principal impulsor, con un incremento anual del 16% respecto al ejercicio anterior. Durante 2015 hemos podido cerrar transacciones claves en línea con la nueva estrategia de la compañía, que fortalecen nuestra posición en Dermatología y nos proporciona una presencia inicial en el mercado estético”.

“Durante este periodo, hemos mantenido una situación financiera saludable para poder apoyar potenciales adquisiciones que generen valor sostenible para los accionistas”, quiso resaltar.

El Consejo de Administración propondrá en la próxima Junta General de Accionistas un dividendo bruto de 33 millones de euros o de 0,19 euros por acción, lo que representa un 40% del resultado neto normalizado.

Para 2016, Almirall prevé crecimiento porcentual de un dígito alto en ingresos totales, ventas netas y Ebitda.