Iberdrola ha obtenido un beneficio neto de 868,7 millones de euros en el primer trimestre de 2016, lo que supone un aumento del 3,3% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

El beneficio bruto de explotación (Ebitda) se ha situado en 2.008 millones de euros en los tres primeros meses del año, un 6% menos. Este descenso se debe a los factores atípicos registrados en el trimestre que previsiblemente serán compensados a lo largo del año.

Un 73% del Ebitda procede de los negocios regulados o con contratos de venta de energía a largo plazo, de acuerdo con la estrategia del grupo. Si se excluyen los mencionados impactos y el efecto del tipo de cambio, el Ebitda se mantiene estable (+0,2%).

gi_s_Valencia_150El beneficio neto recurrente asciende un 5,1%, hasta alcanzar los 836,8 millones de euros, en línea con las perspectivas de crecimiento del resultado presentadas por la compañía el pasado mes de febrero. Por su parte, el flujo de caja operativo (FFO) presenta un incremento del 2,3%, hasta 1.695,9 millones de euros, mientras que las inversiones netas aumentan un 51,1%, hasta 895,6 millones de euros.

La deuda financiera neta de Iberdrola se sitúa en 28.274 millones de euros al cierre del trimestre, frente a los 26.305 millones de euros de marzo de 2015 sin UIL Holdings Corporation -incluyéndola, entonces sería de 28.625 millones de euros-. Excluyendo el impacto de la consolidación de UIL, la deuda se habría reducido un 1,2%, hasta 25.984 millones de euros. El apalancamiento, en términos homogéneos, se sitúa en el 41,3%, frente al 41,7% del primer trimestre de 2015.

También los ratios financieros presentan una evolución positiva en términos homogéneos. Así, el ratio deuda neta/Ebitda se situaría en 3,77 veces; la relación entre los fondos generados en operaciones (FFO) y la deuda neta sería del 21,8% y el ratio flujo de caja retenido (RCF)/deuda neta alcanzaría el 19,2%.

Iberdrola continúa reforzando su posición de liquidez, que ronda los 8.500 millones de euros al cierre del primer trimestre.

Con el respaldo de los accionistas, el Consejo de Administración del grupo ha aprobado la ejecución de una nueva edición del programa Iberdrola Dividendo Flexible. La empresa ofrecerá a sus accionistas, el próximo mes de julio, la posibilidad de recibir una retribución de, al menos, 0,123 euros brutos por acción, además de un dividendo en efectivo de 0,03 euros brutos por título, con lo que la segunda remuneración al accionista se sitúa en 0,153 euros brutos por acción, un 7% más que la de julio de 2015.

Estos importes se suman a los 0,127 euros brutos por acción distribuidos el pasado mes de enero, con lo que Iberdrola avanza en su compromiso de ofrecer una retribución al accionista con cargo a 2015 de, al menos, 0,28 euros brutos por acción.