Banco Popular ha informado de que reducirá el número de oficinas en aproximadamente 300 y despedirá a cerca de 3.000 empleados.

Según ha señalado la entidad bancaria, estas medidas se incluyen dentro de un proceso de reestructuración para optimizar la red de oficinas del banco, las estructuras de apoyo a la red comercial y los servicios corporativos.

El objetivo de esta propuesta, “es mejorar la rentabilidad y eficiencia del banco según lo comprometido en el Plan de Negocio anunciado con la ampliación de capital del pasado mes de mayo, así como contribuir a modernizar su estructura”.