Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido de 4.606 millones de euros en los nueve primeros meses de 2016, lo que representa un 22,5% menos que en el mismo periodo de 2015.

Según ha explicado la entidad, esta reducción es resultado de las operaciones extraordinarias del segundo trimestre, entre las que se encuentran los costes de reestructuración (-475 millones de euros), las plusvalías por la venta de VISA Europe (+227 millones de euros) y un cambio en el calendario de aportación al Fondo de Resolución Europeo (-120 millones de euros).

JoseAntonioAlvarezExcluidos los impactos de las operaciones extraordinarias y del tipo de cambio, el beneficio aumentó un 8%, a 4.975 millones de euros.

“Nuestros resultados en los nueve primeros meses de 2016 son buenos, con un millón más de clientes vinculados que confían en nosotros. Además, nos mantenemos entre los bancos líderes por rentabilidad.
La fortaleza del modelo nos permite avanzar en el cumplimiento de nuestros objetivos, pese al entorno de bajos tipos de interés en las economías desarrolladas. Este año destaca el crecimiento de Latinoamérica y del negocio de financiación al consumo” señala la presidenta Ana Botín.

El margen de intereses del Grupo aumentó un 2% con respecto al año anterior, con crecimientos en siete de sus mercados, gracias al crecimiento de los volúmenes de créditos y depósitos, particularmente en Latinoamérica, Polonia, Portugal y Consumer Finance.

Los costes de explotación crecieron un 4,1%, hasta 15.634 millones de euros, en parte por el impacto de la inflación en algunos mercados y el aumento de perímetro, y en términos homogéneos, cayeron un 1%. Por su parte, las dotaciones para insolvencias se mantuvieron “prácticamente planas” en los nueve primeros meses, en 7.112 millones de euros.