CaixaBank obtuvo en 2016 un beneficio atribuido de 1.047 millones de euros, lo que supone un aumento del 28,6% con respecto 2015. Con este resultado, supera los 1.000 millones de beneficio por primera vez desde el ejercicio 2011.

El resultado antes de impuestos alcanza los 1.538 millones, lo que supone un crecimiento del 141% en comparación a 2015 y el resultado del negocio bancario y asegurador asciende a 1.979 millones de euros, con una rentabilidad (ROTE) del 10,8%.

la Caixa y CaixaBankEl resultado obtenido se apoya en la evolución de los ingresos y los gastos recurrentes, que permite que el margen bruto se mantenga estable en 7.827 millones y el margen de explotación alcance los 3.711 millones (+15,3%), el menor impacto de los gastos extraordinarios respecto a 2015 (-77,7%) y la reducción de las pérdidas por deterioro de activos financieros y otras provisiones (-57,5%).

La mejora de los indicadores de calidad de activo y la liberación de fondos por insolvencias tras el desarrollo de modelos internos consistentes con los criterios de la Circular 4/2016, entre otros, reduce las pérdidas por deterioro de activos financieros y otras provisiones en un 57,5%, hasta los 1.069 millones. El coste del riesgo se sitúa en el 0,46%, -27 puntos básicos en 2016, excluyendo la liberación de provisiones.

La estimación de la cobertura por insolvencias, acorde con los modelos internos mencionados, reduce la necesidad de provisiones de la cartera crediticia en 676 millones de euros. Por otra parte, tras la aplicación de modelos internos consistentes con los previsto en la Circular 4/2016, se han realizado dotaciones por 656 millones en la cartera de adjudicados disponibles para la venta.

En el cuarto trimestre de 2016 se ha registrado una provisión adicional de 110 millones de euros tras reestimar el valor presente de los desembolsos que se espera pueda derivarse de las cláusulas suelo, adicional a los 515 millones de euros registrados en 2015.

En el último año, la ratio de morosidad ha descendido 103 puntos básicos, hasta situarse en el 6,9%. Esta evolución se ve impactada por la continua caída de los saldos dudosos, que se han reducido en 2.346 millones en los últimos doce meses y 445 millones de euros en el cuarto trimestre.