El número de huelgas registradas en España durante los ocho primeros meses del año ascendió a 538, que fueron secundadas por 199.759 trabajadores y en las que se perdieron 6.479.156 horas de trabajo.
Según los datos de conflictividad laboral, analizados por los servicios técnicos de CEOE, respecto al mismo periodo del año pasado, las huelgas aumentaron un 3,07%, un 69,87% las horas de trabajo perdidas y un 124,08% los trabajadores en huelga.
En esta comparación hay que tener en cuenta, según apunta CEOE, la repercusión en la conflictividad laboral de las huelgas registradas en el sector de transportes y comunicaciones en los meses de abril a agosto, sobre todo en el sector del taxi, el metro de Madrid y Barcelona o Renfe, así como la de estibadores en junio y los controles de seguridad del aeropuerto de El Prat en agosto de 2017.
Por lo que se refiere a la conflictividad estrictamente laboral -la que queda al restar de esos totales la cantidad derivada de huelgas en servicios de carácter público y por motivaciones extralaborales-, en el periodo enero-agosto se contabilizaron 379 huelgas, con 41.803 trabajadores implicados que perdieron 2.526.646 horas de trabajo. En comparación con igual periodo de 2016, las huelgas crecieron un 0,53%, las horas de trabajo perdidas aumentaron un 66,84% y los trabajadores que participaron en ellas subieron un 119,85%.
En los ocho primeros meses se produjeron 139 huelgas en empresas o servicios de carácter público, secundadas por 155.392 trabajadores, en las que se perdieron 3.772.598 horas de trabajo. Respecto a los mismos meses del año pasado, han crecido el número de huelgas (16,81%), las horas de trabajo perdidas (64,34%) y los trabajadores que participaron en las huelgas (113,18%).
