El proveedor de servicios de navegación Saudi Air Navigation Services (SANS) ha confiado a Indra un ambicioso proyecto para implantar un sistema de nueva generación que ordenará el tráfico aéreo de todo el país y contribuirá a multiplicar el número de vuelos que puede gestionar.

El proyecto, que se extenderá durante los próximos tres años hasta 2020, se enmarca dentro del plan Vision 2030 del Reino para diversificar su economía y convertir el turismo en palanca de crecimiento.

Indra actuará como socio clave en la modernización de la infraestructura de transporte aéreo del país y lo preparará para que pueda absorber más tráfico y recibir más visitantes; está previsto que el número de peregrinos que utilizan los aeropuertos de SANS para acudir a La Meca y Medina prácticamente se triplique hasta los 20 millones al año, desde los ocho millones actuales.

La compañía modernizará los dos centros de control ubicados en Yeda y Riad que gestionan los vuelos en ruta en todo el espacio aéreo del país y los dos centros de control de aproximación de Dammam y Abha, que dan servicio a los aeropuertos. Indra también equipará con su tecnología las torres de control de una veintena de aeropuertos, entre los que se encuentran los de Yeda, Riad, Abha y Dammam.

El sistema de automatización de la gestión del tráfico aéreo de Indra incorpora las tecnologías más avanzadas del mercado, que superan ampliamente los requisitos que exige la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).

Esta tecnología mejorará la posición de SANS para convertirse en hub global y atraer a las principales aerolíneas del mundo para que fijen su base en Arabia Saudí. También le permitirá atender la creciente demanda de vuelos que quieren cruzar su espacio aéreo para dirigirse hacia Asia o Europa, lo que le reportará mayores ingresos por los servicios de navegación en ruta que presta.

Por otra parte, la fuerte posición de Indra en la región como el principal suministrador de sistemas de gestión de tráfico aéreo representa una importante ventaja para SANS, ya que sus centros de control compartirán la misma base tecnológica que Indra ha implantado en Omán,  Kuwait y Emiratos Árabes.

Esto garantiza una interoperabilidad perfecta y sin fisuras entre centros de control y facilita que los controladores asuman o traspasen la gestión de los vuelos con facilidad. Esta fluidez elevará la puntualidad en los aeropuertos y la eficiencia en la gestión del tráfico, permitiendo además que las aeronaves ahorren combustible y vuelen de forma más limpia y respetuosa con el medioambiente.

Esto se traduce en mayores ingresos y menores costes para SANS, que ofrecerá los máximos niveles de seguridad y el mejor servicio posible a las aerolíneas. Indra completa su presencia en la región con proyectos de implantación de radioayudas en Bahréin y Qatar.