Los pisos en el mercado que se ofertan sin muebles son, de media, un 39,2% más económicos que los que se arriendan amueblados, según un estudio publicado por idealista. Aún así, menos de uno de cada tres viviendas en el mercado (30,6%) se ofertan vacías.

Dentro del 30% de viviendas en alquiler que se ofertan sin muebles, existen dos modalidades: el 21,4% de los anuncios se alquilan con la cocina montada (con frigorífico, lavadora y fuegos al menos) pero el 9,2% restante lo hace sin ningún mueble, por lo que los inquilinos deberán encargarse de proveerse de todos los electrodomésticos.

Barcelona es la ciudad en la que las diferencias de precio entre las viviendas sin amueblar son mayores frente a las amuebladas, ya que las rentas que solicitan los propietarios de las primeras son un 35,9% más bajas que las segundas. Le siguen las ciudades de San Sebastián (-31,6%), Logroño (-15,1%), Albacete (-13,8%), Ávila (-12,8%) y Almería (-12,4%). En Madrid, la diferencia entre ambos tipos de alquiler es del 9,1%.

Por el contrario, en algunas capitales los precios de las viviendas sin muebles son más elevados que las amuebladas. Es el caso de Cáceres (13,2% más caro), Lugo (12%), León (11,6%), Bilbao (9,3%), Sevilla (6,7%), Pontevedra (4,4%) y Santander (2,7%). La explicación a este fenómeno viene dada porque en muchas ocasiones las viviendas sin muebles que se ofertan se sitúan en los tramos más altos de precio.

Oferta minoritaria

Madrid es la capital en la que el porcentaje de viviendas sin muebles en el mercado es mayor: la mitad (50,1%) de todo el parque disponible se alquila sin amueblar. Le siguen las ciudades de Girona (40,8%), Santa Cruz de Tenerife (40%), Palma (39,9%), Barcelona (39,9%), Ourense (39,9%) y León (37,4%).

Por el contrario, el alquiler sin muebles es prácticamente anecdótico en ciudades como Lugo -donde solo el 4,1% del parque ofrece esa posibilidad-, Jaén (5,6%), Cádiz (6,7%), Santander (7,7%), Salamanca (8,8%), Cáceres (8,9%), San Sebastián (8,9%) y Toledo (9,5%).