El 66,1% de los autónomos españoles tiene un empleo por cuenta propia por necesidad, frente al 33,9% restante que lo ha hecho porque ha detectado una oportunidad laboral. De hecho, siete de cada 10 tenían anteriormente un trabajo por cuenta ajena, según muestra una encuesta de Infoempleo y Grupo Adecco.

Para montar su propio negocio, los consultados aseguran que su principal fuente de financiación son los ahorros y el capital propio (68,3%). En menor medida, recurren a otras vías como la familia o los amigos (26,6%), los préstamos bancarios (13%) o la capitalización del paro (11,2%).

Además, los autónomos consideran que lo importante para lograr el éxito como freelances es contar con la experiencia profesional adecuada, tal y como señala el 34,6% de ellos. También lo es tener una buena idea empresarial (24,4%).

En España, el 36,5% de los autónomos es TRADE, es decir, es económicamente dependiente, pues más del 75% de su facturación proviene de una única empresa.

Por su parte, el 47,5% de los freelances considera que el principal inconveniente del trabajo por cuenta propia son las elevadas cargas sociales y administrativas. Otro de los grandes obstáculos es la alta fiscalidad, según el 42,5%.

A pesar de las dificultades, la encuesta muestra que más de seis de cada 10 autónomos afirman sentirse más felices desde que trabajan de forma independiente. Y entre las ventajas de las que disfrutan, más de la mitad cree que lo mejor es ser su propio jefe (53%), seguido de establecer sus propios horarios laborales (45,6%) y tener mayor libertad (43,4%).

En materia de contratación, solo el 12,2% de los autónomos tiene pensado contratar personal durante el año, mientras que el 82,7% no lo hará y el 1,3% incluso reducirá plantilla.

Preguntados por las políticas públicas de empleo, el 55,3% de los autónomos considera que el principal objetivo que tienen es recaudar dinero de empresas y/o trabajadores.

Finalmente, los freelances encuestados trabajan desde su casa (44,4%), cinco días a la semana (38,2%), entre 8 y 10 horas diarias (34,7%) y cobran entre seis y 10 euros por cada hora trabajada (24,8%).