Las redes de contactos no proporcionan un empleo, sino la información que ayudará a conseguirlo

En el mercado laboral existen dos grandes dimensiones. Por un lado, la visible o mercado abierto, constituido por las ofertas públicas o de fácil acceso para el candidato. Y, por otro lado, encontramos la cara no visible o mercado oculto, que hace referencia a esa cantidad de ofertas de empleo que no son visibles para la mayoría.

Se trata de vacantes que no son publicadas porque las empresas prefieren no hacer explícitas, cubriéndolas a través de promociones internas, acudiendo a sus propias fuentes de reclutamiento, bases de datos, intermediarios o referencias de personas de confianza o búsqueda directa. Este mercado oculto supone en nuestro país en torno al 75% de las vacantes, o incluso más, y depende en gran medida del perfil, sector o ámbito geográfico en el que se busque cubrir esa posición.

En este contexto, Lee Hecht Harrison, división del Grupo Adecco y líder global en el acompañamiento a las organizaciones en sus procesos de transformación (‘Workforce Transformation’), ha analizado ese mercado laboral oculto para ver su modelo de funcionamiento. Entre las principales conclusiones de este análisis destaca que una de las herramientas más efectivas para conseguir un empleo es, sin duda, la red de contactos, el conocido como networking, que contribuye en gran medida a cubrir muchas de las denominadas vacantes ocultas.

De hecho, el XIII Informe de Recolocación publicado por Lee Hecht Harrison ya revelaba los medios de acceso al mercado laboral por parte de los candidatos recolocados, apuntando a esta tendencia. Así, más de la mitad de estos profesionales consigue un puesto de trabajo gracias a la red de contactos, concretamente el 52%.

Estos datos confirman una realidad de sobra conocida: los contactos son uno de los activos más valiosos en el mercado laboral y pueden ser clave para encontrar un empleo. Las compañías valoran tener referencias positivas de los candidatos y prefieren contratar a personas que vengan recomendadas por alguien de confianza que ya está dentro de su entorno, como trabajadores, familiares, amigos, clientes, proveedores, etc. De esta manera, a través de la red de contactos, las empresas se ahorran costes en los procesos de selección, y, al mismo tiempo, evitan publicar detalles de su estrategia empresarial, que puedan llegar a oídos de la competencia.

5 de cada 10 candidatos

Gracias el networking, más de la mitad de los candidatos recolocados (52%) se reincorpora al mercado laboral y consigue un puesto de trabajo, según muestra el XIII Informe Lee Hecht Harrison sobre Outplacement.

Además, Internet (las plataformas de empleo, los sitios web corporativos…) es el método por el que 2 de cada 10 candidatos logran un empleo. En menor medida, están las candidaturas que se tramitan a través de un intermediario (7%) y el 1% que consigue un empleo gracias al redeployment, cuando un candidato se recoloca en otra posición en su misma compañía.

Canarias, líder en recolocación a través de contactos

Los porcentajes de personas recolocadas a través de la red de contactos varían considerablemente en función de la comunidad autónoma. Canarias es la que más recurre a esta práctica: 8 de cada 10 personas recolocadas en el archipiélago lo han conseguido a través de sus contactos.

Le siguen, a relativa distancia, Baleares y País Vasco, donde el 68% de los trabajadores de cada una, ha sido recolocado mediante esta fórmula. Muy de cerca encontramos a Asturias, con el 67%. Por su parte, 6 de cada 10 aragoneses han utilizado el networking para volver al mercado laboral así como 6 de cada 10 recolocados en Galicia.

Por debajo de la media nacional, que es del 52%, se encuentran la Comunidad de Madrid y la Región de Murcia, con un 51% y 50%, respectivamente. Por detrás de ellas, aparecen Castilla-La Mancha (42%) y Andalucía y Castilla y León, con un 41% en cada una de estas comunidades.

Los candidatos de Cataluña y La Rioja se han beneficiado del networking 4 de cada 10 veces, en ambos casos. En menor medida, Cantabria, con un 39%; Extremadura, con un 38%; y la Comunidad Valenciana, con un 33% siguen a continuación. Navarra es la comunidad autónoma donde menos se recurre a la red de contactos para la recolocación, pues solo 2 de cada 10 recolocados se valen de ella para volver a trabajar.