La ministra de Fomento, Ana Pastor, acompaña a Su Majestad el Rey durante su visita a Arabia Saudí, en el marco de una gira por los países del Consejo de Cooperación del Golfo que comenzó en Emiratos Árabes Unidos y Kuwait y continuó en Omán y Bahrein. Al viaje también asisten los ministros de Defensa, Pedro Morenés, y de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.

En su visita, Pastor ha mostrado la disposición de las empresas españolas en continuar participando en los proyectos de infraestructuras de transporte de Arabia Saudí, donde ya trabaja un consorcio liderado por compañías españolas en el proyecto ferroviario Haramain.

Dicho proyecto consiste en la construcción y operación de una línea ferroviaria de alta velocidad que unirá La Meca y Medina, facilitando así el flujo de visitantes entre ambas ciudades y, sobre todo, el de los millones de peregrinos que visitan La Meca cada año. El presupuesto adjudicado a la segunda fase de esta obra, 6.736 millones de euros, supone el mayor contrato de ámbito internacional conseguido por empresas españolas.

La ministra de Fomento resaltó que en este gran proyecto que “desde el principio ha apoyado su Majestad el Rey”, actualmente ya hay más de mil profesionales españoles trabajando en él, al mismo tiempo que hay profesionales saudíes que ya se están formando en España. Asimismo, indicó que los trabajos van avanzando con normalidad y que “estamos en disposición de que a principios del año que viene” se puedan hacer ya los primeros test con un tren sobre la vía.

Además de esta importante infraestructura, en Arabia Saudí se está desarrollando un ambicioso programa para expandir la red ferroviaria en el país.

Entre otros, destaca el Proyecto Landbridge, que comprende las conexiones entre Jeddah, en el Mar Rojo, hasta Damman, en el Golfo Pérsico (950 kilómetros), y entre Damman y Jubail (115 kilómetros). Asimismo, en este programa figura la línea Norte-Sur (2.750 kilómetros) entre Riad y Al Hadeetha (próxima a la frontera con Jordania). Junto a ellos, se encuentran la sección saudí del Consejo de Cooperación del Golfo (GCC); posibles nuevas líneas de alta velocidad como la contemplada entre Riad y Dammam o las líneas que unirán Jeddah con Yanbu o Gizan; y el puente de conexión entre Arabia Saudí y Bahréin.