Las empresas son conscientes de que la información tiene un valor pero están más preocupadas por defenderla ante brechas de datos o acciones legales que por utilizarla para extraer ventaja competitiva e impulsar el crecimiento, según se desprende de un nuevo informe de la compañía de custodia y gestión de la información Iron Mountain y PwC.

El Índice de Madurez del Riesgo de la Información 2014 es el tercer estudio anual que mide la preparación de las empresas para gestionar y dar respuesta al riesgo al que se enfrenta su información y otras tendencias clave. Mientras que en las ediciones anteriores el estudio se centraba en las empresas de tamaño medio en Europa, este año el estudio cubre la mediana y gran empresa tanto en Europa como en Estados Unidos y Canadá.

Aproximadamente tres cuartos de las empresas encuestadas (68% en España, 72% en Europa y 79% en Norteamérica) consideran la información como un activo empresarial, aunque solo una media de un 35% pide a analistas de datos que extraigan el valor de esta información.

Los encuestados reconocen que la información les ha ayudado a mejorar su toma de decisiones, entender mejor a sus clientes e impulsar los ingresos, pero su potencial en otras áreas clave queda sin explotar. Solo el 51% de las empresas europeas (el 47% en España) – porcentaje que en Norteamérica sube hasta el 65% – usan la información para mejorar sus productos o para innovar en sus servicios. Una cuarta parte de las empresas – 20% en España, 21% en Europa y 28% en Norteamérica – usan la información para ser más rápidos en el mercado, mientras – como mucho – una entre diez (5% en España, 10% en Europa y 4% en Norteamérica) afirma que la información le ha servido para estimular los ciclos de desarrollo de productos o servicios.

A la pregunta de cuáles son sus prioridades en cuanto a la gestión de la información, la mayoría se centra en evitar una brecha de datos (66% en España, 76% en Europa y 85% en Norteamérica) y en evitar acciones legales o multas por no cumplir la normativa (61% en España, 74% en Europa y 79% en Norteamérica).