La convocatoria 2017 del Fondo Extraordinario de Anticipos Reintegrables (FEAR) ha llegado a su fase de adjudicación con la distribución de 46,7 millones de euros entre todas las entidades locales que han presentado su solicitud en esta edición.

De esta forma, 47 ayuntamientos más la Mancomunidad de Servicios de la Vega y el Consorcio Campiña Sur Estepa son los adjudicatarios de unas transferencias previstas para la semana próxima, entre el el 13 y el 19 de noviembre.

Villalobos en presentación convocatoria FEAR 2017 el pasado mes de septiembreEl presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha destacado “cómo se mantiene la tendencia iniciada en el ejercicio anterior en cuanto al tipo de ayuda solicitada de modo que las líneas dedicadas a las inversiones y a la refinanciación de operaciones a largo plazo suponen en conjunto más del 64% sobre el total del FEAR adjudicado”.

Con destino a inversiones -línea 2 de esta convocatoria-, las entidades han solicitado en total más de 20 millones, cerca de un 43% del global; para refinanciación de operaciones a largo plazo -línea 3-, 9,9 millones, más de un 21%. Otra cifra destacable por su reducción en 50% es la dedicada a operaciones de tesorería, ya que en esta edición 2017 las entidades han solicitado algo más de 12,1 millones -un 25,9% del total- muy lejos de los 24,3 millones pedidos en el conjunto de las dos convocatorias de 2016.

“Con estos datos se ve claro que las entidades locales están cada vez más saneadas -ha explicado Villalobos- y por ello se impone un cambio en la actitud del gobierno central, un gesto que permita flexibilizar la regla de gasto para que las entidades locales puedan invertir y dar un mejor servicio a sus vecinos y vecinas”.

En el resto de líneas de contenido, este FEAR tiene adjudicados cerca de 600 mil euros a la línea 1, denominada línea de préstamo de Mandato; más de 611 mil euros a la línea 4, para cancelación de deuda con la Seguridad Social y con la Agencia Tributaria del Estado; y unos 3,4 millones para la línea 6, dedicada a convertir en largo plazo deuda contraída para el corto.