Sin duda, la trayectoria de la actividad económica en Andalucía y en España se encuentra cada vez más determinada por la evolución de la economía en el ámbito europeo, al tiempo que el clima socioeconómico y financiero también condicionan el tejido productivo, incidiendo directa o indirectamente en decisiones empresariales (inversiones, ampliaciones), en el dinamismo de distintos sectores productivos, en el empleo y, por tanto, en la demanda de bienes y servicios por parte de los hogares. Por estas razones, resulta relevante analizar al entorno económico reciente, a fin de aproximar cuál va a ser el comportamiento de las principales variables en 2014.
Desde la perspectiva de lo ocurrido en el panorama económico mundial en el balance de 2013, cabe señalar que se ha producido una estabilización -gracias también a la menor tensión en los mercados financieros-, atenuándose las diferencias en el ritmo de crecimiento por grandes áreas. En concreto, se han observado signos de una mejora gradual en las economías avanzadas, mientras el fuerte avance de las economías emergentes se habría frenado, aunque seguirán mostrando un ritmo muy superior al conjunto de Europa. Además dentro de la UE y de la propia Zona Euro también se esperan diferencias notables entre los Estados miembros: el ritmo de avance del PIB en 2014 se espera ronde el 1,1% (proyecciones de la Comisión) y será inferior al del conjunto europeo en países como Chipre, Eslovenia, Países Bajos y España. Precisamente, para la economía española, el Ejecutivo de Bruselas proyecta un crecimiento escueto del PIB cercano al 0,5%. También serán modestos los aumentos correspondientes a países como Grecia y Finlandia (0,6% en ambos), Italia (0,7%) y Francia (0,9%). Por el contrario, se espera que alcancen un ritmo superior al promedio de la UEM, países como Alemania e Irlanda (1,7%), mientras el crecimiento previsto será más elevado en otros de la UE, como Reino Unido y Suecia (2,2% y 2,8%, respectivamente).
La salida de la Zona Euro de la recesión, como la de España y Andalucía, se ratificará en 2014 pero con avances bastantes modestos, acorde a la falta de empuje de la demanda interna y a los elevados niveles de desempleo existentes. Pese a todo, se espera que el consumo registre una tasa de crecimiento anual positiva, por primera vez desde el comienzo de la larga crisis, y quizá haya una creación neta de empleo (las previsiones en este tema no son unánimes y, por ejemplo FUNCAS prevé un crecimiento del 0% para este indicador).Y ello a pesar de que algunos desequilibrios macro se han reducido, la confianza está volviendo a los agentes, y que la política monetaria del BCE sigue siendo laxa, dada la ausencia de inflación. De hecho, las altas tasas de paro, el descenso en la renta disponible de las familias y la moderada reducción de su endeudamiento, unido a una posible creencia por parte de los agentes en que los precios pudieran seguir bajando, podría llegar a inhibir las decisiones de gasto, explicando los riesgos bajistas que subyacen en las proyecciones para 2014. En cualquier caso, la pérdida de riqueza (PIB per cápita) en los últimos años resulta evidente, habiendo retrocedido a niveles de finales de los noventa.
Entre las propias instituciones españolas que realizan previsiones también existen discrepancias sobre el ritmo de crecimiento que se podría alcanzar en 2014. La menos optimista es la del FMI, que proyectaba una tasa escueta del 0,2% para el próximo año, mientras la Comisión Europea augura un 0,5% de avance; el Gobierno en sus PGE-2014; el 0,7%, por su parte FUNCAS augura una tasa algo más elevada, del 1%; un crecimiento muy similar al de Analistas Económicos de Andalucía.
Para las comunidades autónomas y, en concreto, para Andalucía, los organismos que realizan previsiones son muchos menos abundantes, teniendo como referencia la proyección de la propia Consejería de Economía: un 0,3% para 2014, ritmo que se queda por debajo del crecimiento previsto por Hispalink (0,8%) y de Analistas Económicos de Andalucía, que espera un tasa próxima al 1%. (Ver gráfico adjunto).
Esperanza Nieto Lobo
Previsiones del comportamiento de las principales variables en 2014 de la mano de Analistas Económicos de Andalucía
