El mercado de automoción cambiará drásticamente en 2030 como consecuencia del impacto del transporte compartido y del desarrollo tecnológico. Así, en Europa se espera que el parque de vehículos se reduzca un 25% -de 280 millones a 200 millones de unidades- y en Estados Unidos un 22% -de 270 a 212 millones de coches en 2030-.
El informe ‘Eascy: las cinco dimensiones que transformarán el sector de Automoción’, elaborado por PwC, recoge las cinco grandes tendencias que afectarán al sector en los próximos años: la consolidación del modelo de transporte compartido, y la irrupción del coche autónomo, eléctrico, conectado y donde los modelos se actualizarán anualmente.
La combinación de estas tendencias va a dar lugar a escenarios aparentemente contradictorios como, por ejemplo, que el stock de vehículos se reduzca en algunos mercados -Europa y EE. UU.- y, al mismo tiempo, crezca sustancialmente el número de matriculaciones. Un efecto que se explica por un uso mucho más intensivo de los vehículos y una reducción sustancial de su vida media.
En Europa, por ejemplo, se estima que el número de matriculaciones podría crecer un 34% hasta 2030, de 18 a 24 millones de unidades. Y en Estados Unidos un 20%, hasta los 21,6 millones de vehículos. En China, dada su particular situación de mercado con un importante aumento de la población y en pleno proceso de urbanización, sí se prevé un incremento tanto de las matriculaciones -un 30% más hasta los 35 millones- como del parque de vehículos, que alcanzará las 275 millones de coches en 2030.
El documento revela que la transición hacia este nuevo mercado del automóvil va a ser especialmente sensible para los fabricantes y proveedores tradicionales, que tendrán que realizar grandes inversión en innovación en un mercado con unos márgenes cada vez más estrechos y con más competidores que nunca. Además, apunta que las decisiones clave que marcará quienes serán los futuros players del sector se tomarán entre 2020 y 2025.